No sé vosotras, pero yo tenía unas ganas enormes de que empezara a hacer frío, ya me estaba cansando de seguir con las prendas de verano  en el armario  y lo que es peor, salir de casa  a las 9 de la mañana  con una simple camiseta y un jersey fino  y necesitar un forro polar a las siete de la tarde…Sé que mola mucho y es muy guay estar en pleno noviembre en una terracita en la plaza de Santa Ana, pero estaréis conmigo que eso normal, lo que se dice normal no es…El cambio climático está haciendo que desaparezcan estaciones como el otoño o la primavera y solo vivamos un frío helador o un calor insoportable, acordaos de este veranito. Veo que son muchas las personas que siguen sin tomar conciencia de la importancia de proteger y mantener nuestro medio ambiente, aún no se han percatado de la gravedad del asunto o no se han parado a pensar un momento en la idea de que sus biznietos no van a conocer la tierra tal y como la conocemos ahora. Si todos pusiéramos más de nuestra parte con pequeñas acciones como reciclar, poner la calefacción a no más de 21 grados o simplemente tirásemos los cigarros en la basura y no en la arena de la playa, estaríamos un poquito más cerca de recuperar el planeta, un gesto muy pequeño para un logro muy grande.

Fiel a mi propósito pro-naturaleza , he escogido este abrigo de pelo sintético en clave setentera  de Zara como pieza clave de este black total look, falda negra sport de Vila, camiseta ty-die de IRO, botines de Choies y bandolera de Uterque.

Un pequeño gesto, un gran logro

Un pequeño gesto, un gran logro Un pequeño gesto, un gran logro

Me encantan los detalles, no puedo salir de casa sin mis pequeños tesoros 🙂 Las gargantillas son de La Morenita, los anillos de la mano derecha son todos de Asos, menos los tres sencillos que son de la diseñadora Sira Ryf. En la mano izquierda llevo anillos vintage. El reloj es de C21.

¿Vosotras que hacéis para luchar contra el cambio climático?

Hasta la semana que viene!

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